En Casonas Asturianas cada detalle es la esencia de una excelencia que se hace omnipresente. Rincones que invitan a la tranquilidad, y otros que invitan al bullicio. Románticos susurros o conversaciones apasionadas. Baños de sol, de agua dulce, de lluvia.
Y por supuesto una gastronomía que conecta con las raíces, tradiciones y productos de la tierra, y que le pone las cosas muy fáciles al viajero, a la hora de degustar lo mejor y más genuino del Paraíso Natural.