Para la tradición cristiana hay la creencia que en la cumbre del Monsacro estuvieron ocultas las santas reliquias que habrían sido llevadas allí, durante la invasión musulmana, por Santo Toribio, obispo de Astorga.
Posteriormente Alfonso II el Casto habría trasladado las reliquias a la Catedral de Oviedo/Uviéu. Esta consideración del Monsacro como lugar sagrado habría dado lugar a la construcción de las ermitas. La ermita de la Magdalena, o Capilla de Abajo es una construcción románica tardía de los siglos XIII y XIV. Se estructura en planta de nave única y ábside semicircular con diferencia de altura entre la nave y el ábside. Los vanos que se abren en el hastial y ábside fueron abiertos en época reciente.
Al exterior no hay elementos decorativos a excepción de los canecillos de remate de la cornisa y la puerta de acceso. Ésta es de arco de medio punto, toscamente dovelada, que apoya sobre impostas y jambas lisas. Los materiales utilizados en la construcción son mampostería de la zona y sillería para las esquinas, vanos y puerta. En el interior, la nave se cubre con bóveda de cañón apuntado y de media esfera en la zona del ábside.
Esta capilla se ubica muy cerca de la capilla de Santiago.
