Hace más de noventa años que los pioneros del deporte en Asturias se organizaron para aquella primera ronda ciclista por el territorio astur. Desde aquel 1925 hasta este 2017 muchos años, muchas historias y muchas anécdotas se han producido, pero lo que es cierto es que la Vuelta a Asturias sigue bebiendo del espíritu fundacional basado en el esfuerzo personal, en el trabajo en equipo, en la promoción del deporte y especialmente en la promoción de una tierra, la asturiana, que ofrece un escenario inmejorable para pedalear y competir.
La Vuelta Ciclista a Asturias llega a su 60 edición este año, y se celebra en unas fechas especialmente propicias para el disfrute del deporte y el ocio: el puente del primero de mayo, uno de los más emblemáticos de todo el año. Del 29 de abril al 1 de mayo la ronda asturiana recorre en tres etapas una parte significativa de la geografía de Asturias.
La primera jornada transcurre entre la capital asturiana, Oviedo, y Pola de Lena. Un itinerario de gran belleza y también de notable dificultad para los deportistas, en el que el público disfrutará del ambiente urbano de la capital asturiana, para sumergirse después en una etapa de mucha naturaleza, que culmina en un lugar tan agradable y acogedor como Pola de Lena, auténtica puerta de Asturias, y que cuenta en su concejo con hitos históricos tan importantes como la iglesia prerrománica de Santa Cristina del Lena.
La segunda etapa, el 30 de abril, va de Soto de Ribera hasta Cangas del Narcea, siendo este municipio un lugar destacado en la geografía e historia asturiana. Ribera de Arriba cuenta con pueblos tan emblemáticos como Bueño, que es Pueblo Ejemplar de Asturias y tiene un importante legado etnográfico de arquitectura tradicional, siendo la sede del Museo del Hórreo. La etapa culmina en el Alto del Acebo en Cangas del Narcea, donde se encuentra el Santuario del Acebo, uno de los más emblemáticos de toda Asturias y un lugar con espléndidas vistas panorámicas.
La tercera jornada, entre Cangas del Narcea y Oviedo, nos lleva por todo el occidente asturiano, entre parajes de gran belleza, hasta la capital asturiana, brillante y ambientado punto y final para una ronda que es ya todo un clásico del deporte y del ocio turístico.
La Vuelta Ciclista a Asturias se convierte así por derecho propio en uno de los más significativos alicientes para disfrutar del tiempo libre al aire libre que tiene lugar en la geografía astur en estas fechas.