En el corazón del occidente asturiano, en tierras de ferreiros se alza esbelta la iglesia de San Martín, iglesia parroquial de Taramundi. Se trata de un edificio de tres naves cuya torre, a los pies, fue reedificada en el siglo XVIII, muy elevada, cuadrada y maciza. Tiene el cuerpo de campanas calado con cuatro arquillos, así como un reloj y una hornacina que alberga la imagen en piedra de San Martín Obispo, titular del templo.
El templo conserva cuatro retablos, todos dorados y policromados, dos de ellos, el de Cristo Crucificado y el de la Dolorosa, son gemelos, de estilo rococó-neoclásico, realizados a fines del XVIII o principios del XIX. El retablo mayor es del siglo XVII.