La Semana Santa de Villaviciosa es una de las más antiguas de Asturias. Ya está documentada su celebración en pleno siglo XVII, y lo cierto es que el pueblo maliayés fue transmitiendo la tradición y la savia de la Semana Santa de generación en generación, y conmemorando cada año una fiesta de carácter religioso, que suma además un fuerte ingrediente cultural y artístico.
Todo el pueblo se une en la conmemoración de los Misterios de la Pasión y Muerte de Jesús de Nazaret y lo hacen encantados de expresar de manera pública una tradición y sentimiento heredado de sus antepasados.
Las imágenes religiosas que exhibe la Semana Santa de Villaviciosa son de alto valor artístico, y las celebraciones, especialmente el Miércoles y Viernes Santo, merecen mucho la pena porque durante esos días se puede presenciar El Encuentro y el Descendimiento de la Cruz o Desenclavo, que son verdaderos autos sacramentales, con fuerza dramática.
La Semana Santa se vive con pasión en las calles de Villaviciosa, y todo se inunda de devoción, representación y tradición.
Es una magnífica ocasión para conocer esta Villa, con tanta historia, tanto ambiente y gentes hospitalarias y abiertas.
