Asturias es un auténtico paraíso para el disfrute del turismo activo, por ser un territorio privilegiado desde el punto de vista de su riqueza y variedad natural, y desde el punto de vista de la protección de la naturaleza. De sus más de 10.000 kilómetros cuadrados de superficie, un tercio está protegido, y además cuenta con 7 Reservas de la Biosfera, ocupando un destacado puesto en el ranking español e internacional.
Sus montañas, sus cumbres, sus valles, sus pueblos y aldeas, sus bosques, sus ríos, sus cañones fluviales, sus playas y mareas, sus acantilados, su litoral, sus senderos y sendas de interior y de costa, sus caminos y rutas, o sus sinuosas carreteras secundarias, son parajes perfectos, entre otros, para la práctica de diferentes modalidades de turismo activo.
El turismo activo de Asturias está profundamente vinculado al medio rural y natural, y ello le confiere un plus de autenticidad y atractivo que lo hace diferente para que tengas experiencias únicas e inolvidables.